El nervio vago, el nervio de la salud

El nervio vago, parte del sistema nervioso parasimpático, es el más largo que tenemos, y recorre gran parte de nuestro cuerpo. Es el nervio emocional.

Se origina en el tronco cerebral aproximadamente detrás de las orejas y se extiende por cada lado del cuello, cruza el pecho y llega hasta el abdomen.

El nervio vago conecta el tronco cerebral con casi todos los órganos del cuerpo, con el corazón, pulmones, estómago, intestinos, páncreas, hígado, riñones, bazo y vesícula. Se mueve a través de casi todos los órganos esenciales.

 

El nervio vago del sistema nervioso parasimpático es el ‘interruptor’ que ayuda a cambiar el modo acción hacia la regulación de tu frecuencia cardíaca y la respiración, la digestión, la relajación, el descanso, la recuperación, la reparación de tejidos y en definitiva, la curación.

 

Controlar el nivel de inflamación del cuerpo es una de las funciones mas importantes del nervio vago. Es el mayor sistema de control inflamatorio del cuerpo.

Lo que pasa en el nervio vago, va a todo tu organismo.

 

El primer principio de una curación efectiva es que su sistema nervioso debe calmarse. El nervio vago hace eso, calma tu sistema nervioso, (si está funcionando bien y tiene el tono adecuado).

En posts anteriores ya hemos hablado del ‘estado simpático mantenido’. Tu cuerpo no puede curarse en modo simpático, es decir, cuando se está defendiendo.

 

Las células están en modo de crecimiento o en modo de defensa, no pueden estar en ambos al mismo tiempo. (Bruce Lipton)

 

El nervio vago es el interruptor que activa el modo de curación. Si eso funciona bien, todo lo demás puede funcionar mejor. Si no funciona bien, todo el sistema nervioso estará modo lucha o huida.Trabajar el nervio vago también mejora el tránsito intestinal y, en general, los problemas del aparato digestivo relacionados con el estrés.

 

NERVIO VAGO Y ESTÓMAGO

Un nervio vago en tono bajo, causa un descenso del ácido estomacal, la llamada hipocloridia. ( En este artículo puedes leer más en profundidad sobre esta condición que causa acidez, reflujo, inflamación y malas digestiones entre otras cosas)

El estómago y el duodeno son el primer ‘punto diana’ del ESTRÉS INTENSO Y PROLONGADO.

Algunas personas tienen úlceras, acidez, reflujo y/o inflamación gástrica por vivir constantemente en la química del estrés incesante, o como yo le llamo ‘estado simpático mantenido’

El digestivo se desbalancea debido a la irritación nerviosa de la zona. Esto frecuentemente va acompañado de la irritación del nervio celíaco en el plexo solar.

El plexo solar, también llamado plexo celíaco, es un sistema de nervios y ganglios radiantes. Se encuentra en la boca del estómago frente a la aorta y es parte del sistema nervioso simpático. Desempeña un papel importante en el funcionamiento del estómago, los riñones, el hígado y las glándulas suprarrenales, y cuando está irritado, toda la molestia estomacal y digestiva aún es más acusada.

El estómago y el plexo solar son algunas de las áreas de palpación para la evaluación y valoración del nervio vago de los pacientes que vienen a consulta.

A su vez estos puntos, también son puntos de liberación de tensión que masajeamos durante las sesiones y si es tu caso, te enseñamos a masajear tu abdomen en casa para liberar tensión y mejorar tus digestiones.

 

NERVIO VAGO, CLAVE DEL EJE INTESTINO-CEREBRO

El intestino y el cerebro siempre van unidos, y el nervio vago es el puente entre ellos.

El NERVIO VAGO es la vía de conexión que facilita la comunicación entre la microbiota intestinal y el sistema nervioso central, su actividad genera cambios en el comportamiento emocional, mental y como ya hemos visto, en el digestivo.

Trabajar el nervio vago también mejora el tránsito intestinal y, en general, los problemas del aparato digestivo relacionados con el estrés. Además, reduce la migraña, frena el deterioro cognitivo y alivia la ansiedad.

Sabemos que una microbiota se mantiene sana dependiendo del tipo de dieta, ingesta o no de fármacos, ejercicio, el estrés/calidad de vida, calidad de sueño.

Del tipo de dieta para la microbiota, ya te he hablado en otros artículos/posts que puedes encontrar en este blog.

La microbiota interactúa continuamente con todos los órganos y tejidos, y también con el cerebro.

 

Las vías de conexión del eje microbiota-intestino-cerebro son:

– Nervio vago, que comunica directamente intestino y cerebro: El balance o desbalance del uno influye directamente en el otro

– Ruta metabólica del triptófano/serotonina

– Los ácidos grasos de cadena corta y otras sustancias también producidas por la microbiota

 

La actividad de este eje interviene en:

  • Sueño
  • Emociones
  • Cognición
  • Socialización
  • Comportamiento
  • Tolerancia al estrés

Además de cuidar la microbiota a través de una pauta nutricional adecuada podemos potenciarlo específicamente con los psicobióticos, que son bacterias que tomadas como suplemento tienen actividad probiótica beneficiosa sobre el eje intestino-cerebro.

En definitiva, cuidar de tu nervio vago va a beneficiarte enormemente en las áreas física, emocional, mental y si me permites, hasta espiritual.

Con el programa KiNervBioBalance te ayudamos a reequilibrar el sistema nervioso y recuperar el bienestar

 

Mientras tanto, te deseo mucha salud.