Mueve la (micro)circulación para ganar salud

En los últimos años la American Heart Association (AHA) ha estado reconociendo el papel crucial de la microcirculación para la salud cardiovascular y la salud general. Según la AHA, muchas condiciones de enfermedad surgen de la disfunción vascular.

La investigación también muestra una correlación directa entre la disfunción microvascular y la obesidad, la apnea del sueño, diabetes, demencia, ciertas enfermedades autoinmunes, enfermedades crónicas, presión arterial alta, enfermedad inflamatoria intestinal y muchos más.

¿Que es la microcirculación?

El sistema circulatorio está compuesto por: la macro- circulación (corazón y los principales vasos sanguíneos: aorta, arteria y venas pulmonares, etc.) toda esta estructura representa el 26% del sistema circulatorio. Todos los medicamentos y tratamientos vasculares actúan sobre el corazón y los vasos sanguíneos más grandes.

Y por la micro-circulación, el 74% restante compuesto por vasos sanguíneos más pequeños:, arteriolas, vénulas y capilares.

La microcirculación es la parte funcional más importante del riego sanguíneo en el organismo humano y se desarrolla en esta red de finos vasos sanguíneos, cumpliendo tareas de transporte vitales como:

– nutrir a los tejidos y a los órganos con oxígeno y con nutrientes,

– eliminar los desechos celulares

– fomentar el buen funcionamiento del sistema inmunitario

Una microcirculación correcta garantiza el suministro suficiente con nutrientes y con oxígeno así como el transporte de toxinas y productos desechos celulares.

La genética, las elecciones de estilo de vida, las exposiciones ambientales, el proceso de envejecimiento o el sedentarismo juegan un papel importante en el funcionamiento  de nuestro sistema circulatorio. Incluso en un escenario perfecto (buena genética, dieta adecuada, ejercicio, etc.), las pulsaciones de nuestra microcirculación disminuyen significativamente con la edad.

Otras consecuencias de una mala microcirculación son: debilitamiento del sistema inmunitario, mayor predisposición a sufrir infecciones y lesiones, mayor predisposición a cuadros inflamatorios y procesos curativos más lentos.

¿Hay alguna manera de recuperar la función microvascular?

La respuesta es sí. Es posible dinamizar y recuperar movimiento de esta microcirculación.

Con la Terapia Físico Vascular Bemer (TFVB), se favorece la vasomoción (movimiento de los vasos) y la microcirculación sanguínea.

Como consecuencia de mejorar esto con TFVB, se fomenta el sistema inmunitario, el rendimiento físico, la vitalidad, la regeneración de tejidos y se mitigan las inflamaciones y dolores, tan comunes en general y sobretodo después de esta etapa de sedentarismo forzado.

La TFVB es un dispositivo médico-sanitario homologado y directamente indicado para los transtornos de microcirculación y vasomoción alterada.

Para probar la TFVB disponemos de bonos de 10 sesiones y alquiler de equipos. Para más información y consultas escribir a: contacto@teresallisterri.com

Mientras tanto ¡salud!